Amistad, para que cuando tu alma añore una Amiga, sin pensar me busques, y yo correré a tu lado.
Sonrisas, para que cuando tus lágrimas se escurran por tu mejilla, ellas disipen tus tristezas.
Grandes sueños, para que cuando en tu mente exista un vacío, ellos atrapen la atención de tu pensamiento.
La firmeza de unos hombros, para que cuando tus piernas se cansen, te sirvan de apoyo al andar. Un ramo de abrazos que, en la caída, te den la esperanza necesaria para levantarte y continuar